Os adjuntamos unas líneas dedicadas por Marina Peña tras su paso po Donostia

“Una dificultad puede convertirse en una oportunidad”

El trabajo, el esfuerzo de tantos años, la dedicación y el empeño de cada uno de los que han participado en esta asociación les ha permitido enseñar, aprender, cambiar, reflexionar, construir y tocar vidas. En definitiva el TDA que muchos consideran un problema se convirtió para este grupo al igual que para otras asociaciones en una oportunidad para hacer la diferencia en la vida de muchos.

Realmente me sorprendió ver en San Sebastián el interés de los participantes que acudieron. Un viernes y un sábado. Pero la verdadera vocación precisamente te lleva a la pasión por lo que haces y una oportunidad de aprendizaje como esta no es percibida como un sacrificio.

Los padres deben reconocer la actitud de estos profesores interesados por aprender, participando activamente y reconociendo la necesidad de hacer un cambio. Reconocer la dificultad del estudiante ya es un gran paso hacer algo al respecto sería una responsabilidad para cada uno como docente si se quiere lograr el verdadero propósito de la enseñanza.

Fue muy emotivo haber podido compartir la mezcla de sentimientos que provoca enfrentar la realidad de los hijos con TDA, solo el que tiene esta experiencia puede comprender lo que el TDA provoca en la familia, en la relación de pareja y en el cirulo con los hijos. Agradezco a los padres presentes en la actividad por haberme dado la oportunidad de compartir sus experiencias, por haber abierto su corazón pero sobre todo por haberse dado el espacio para poder seguir aprendiendo para hacer las cosas mejor.

A cada uno de los miembros de la junta, mi reconocimiento por su esfuerzo, su trabajo y su dedicación espero que sigan sembrando esperanza en tantos que la necesitan

Un abrazo,

Marina Peña

San Sebastián

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